Los ecos de libertad se unieron en la historia como un símbolo de rebelión, miles de hombre dieron su vida por la libertad y ahora nos encontramos en el dilema de lo que significa libertad. Una simple palabra fue y seguirá siendo el centro de atención para pensadores filosóficos y revolucionarios, el pueblo solo seguirá las ideas, pues están sujetos a necesidades insatisfechas y no a la libertad de elección. Para muchos la libertad es utópico y para otros la libertad existe, pero no como nos lo muestran, ¿realmente la libertad es utópico, acaso todo está regido por los hilos del destino y la causalidad?
El hombre interpretó libertad de acuerdo a sus necesidades, algunos pensaron que libertad era tener una familia y elegir que hacer cada día de su vida, pero otros se adecuaron al simple concepto definida por la RAE, la cual nos dice: la Libertad es la capacidad de decisión sobre su pensamiento, sentimientos, actitudes y decisiones, ejercida por un individuo, que a su vez sería tomado como un sujeto libre. Pero si somos libres en todo, llegará un momento en que nuestra libertad perjudique la libertad de otros, y cuando llegue ese momento seremos limitados de libertad.
Acaso el hombre puede decir soy libre, cuando en principio estamos gobernados por un Estado con leyes, normas, códigos y decretos, que limitan nuestras libertad, pues cuando elegimos entre un número limitado de opciones, esa elección no es libre, ya que estaríamos siendo condicionados y obligados a elegir lo que otros nos han establecido, por lo tanto los códigos sociales y políticos son cadenas que oprimen en todos los aspectos la libertad innata de cada individuo.
Por lo tanto, la libertad se vuelve un sueño al suponer que se sabe cómo usarla cuando no es así. Es decir, se cree ser autónomo (libre) cuando se empieza a tomar decisiones propias, pero se pasa por alto que todo ente vive dentro de una cultura, la cual rige unas normas que denominan nuestra personalidad. Por eso es que las decisiones empiezan a tener cierto aire de influencia dada por la sociedad (cultura), intuitivamente crecemos moldeados por los conceptos, normas e ideologías de nuestra cultura.
Pero no en todos los aspectos de la libertad somos engaños, ya que el hombre posee el talento para pensar, es decir ser capaz de razonar y entender lo bueno y lo malo, nos conducen a poder decidir “libremente” y reflexivamente. Por ejemplo; Juan es un alcohólico y está en rehabilitación, llega un momento en que se encuentra frente a un vaso con cerveza, Juan es libre de tomar la cerveza pero la razón le dice que no lo tiene que hacer, finalmente gana la razón y Juan no es libre de tomar una cerveza, por lo que existe la libertad positiva y negativa.
En conclusión la, libertad es limitada y condicionada por la cultura, para una mejor estabilidad, es como tener el infinito en una botella para mejor orden. Además creo que existe la libertad positiva y la libertad negativa, siendo esta última la que no deja satisfecho a todos, ya que el Estado y nuestra razón nos la prohíben. No podemos decir que somos esclavos, pero tampoco libres, la palabra que se busca para definir nuestra condición es tan confusa como la misma libertad.
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